Hablar del paro no es sencillo ¡y mucho menos con nuestros hijos! ¿Cómo podemos explicarles qué es el paro sin que se preocupen demasiado?

Hoy en Escuela de Padres te damos algunas ideas para que hables con los niños sobre el paro.

Por qué hablar con los niños del paro

Aunque no lo creas, los niños pueden sentir que hay algo que no está bien. Aún los más pequeños tienen la capacidad de percibir que algo no funciona y si tú no les explicas qué sucede, pueden sacar sus propias conclusiones pensando por ejemplo que estás enojado con ellos.

Habla con tus hijos sobre lo que ocurre para disipar sus dudas y evitar que «se hagan películas». No necesitas ahondar en el tema pero sí dar una explicación de por qué pasas más tiempo en casa y cómo seguirá la situación.

Cómo hablar con tus hijos del paro

Antes de iniciar la conversación con tus peques, ten en cuenta algunas cuestiones:

  • considera la edad de los niños: no es lo mismo hablar con un peque de 3 que con uno de 12, el nivel de comprensión es diferente, al igual que su nivel de madurez. Para los más pequeños una explicación del estilo «mamá o papá ya no trabaja, por eso estará más tiempo en casa» puede ser suficiente, mientras que los mayores necesitarán más información y posiblemente te realizarán preguntas al respecto.
  • evita hablar del tema culpabilizando a alguien: ya sea a la econonomía, a la empresa… No lo hagas delante de tus hijos, habla del tema con tu pareja cuando los peques no estén delante. Piensa que no tienen capacidad para entender todo lo que dices y es preferible que no te vean nervioso, preocupado, enfadado o frustrado.
  • discute las consecuencias del paro: aunque no lo parezca, es importante que tus hijos comprendan que ahora es necesario cuidar un poco más el presupuesto familiar. De hecho, en algunos casos los niños desean ayudar y pueden incluso ofrecerte vender algún juguete para ayudar a la economía familiar. ¿Una idea? Explícales que necesitas que te ayuden de otra manera, por ejemplo no pidiendo juguetes cuando salís de paseo o cuidando a su hermano menor.
  • dales seguridad: hacer un plan puede ser una buena manera de que tus hijos se sientan seguros. Demuéstrales que sabes qué hacer y que no deben preocuparse porque estás «en ello».

Imagen: Nate Grigg

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