¿A tu hijo le cuesta concentrarse? No te preocupes, es algo bastante habitual… Muchos peques se dispersan cuando están haciendo una tarea, por eso te traemos algunos consejos para ayudar a tu hijo a mejorar su concentración.

¿Los descubrimos?

¿Por qué hay niños distraídos?

Vivimos en un mundo hiperconectado donde recibimos de manera continua información y estímulos. ¡No me digas que no es difícil concentrarse!

De hecho, cada vez son más los adultos que hacemos más de una cosa al mismo tiempo (por ejemplo chequear el móvil a cada rato mientras trabajamos) y ¿no crees que eso baja la concentración? Lo mismo sucede con los peques. Los niños distraídos son resultado de nuestra sociedad.

Consejos para mejorar la concentración de los niños

Ayuda a tu hijo a concentrarse siguiendo estos pasos:

  1. Limita las distracciones: los peques se distraen fácilmente, incluso el ladrido de un perro puede hacer que piensen en otra cosa así que cuando deban hacer deberes o alguna tarea que requiera toda su concentración, apaga la tele o la radio y genera un espacio de relajación, sin ruidos ni juguetes cercanos que puedan llamar la atención de los niños. Si quieres que se concentren en algún juego como un puzzle por ejemplo, ayúdalos a ordenar antes para que desaparezcan de su vista los demás «tentadores» juguetes.
  2. Muestra interés por lo que tu hijo hace: una buena forma de mantener el interés del peque en una tarea es que ¡tú la demuestres también! Si tu hijo está haciendo un puzzle y después de un par de piezas quiere dejar de jugar, ayúdalo. Lo mismo sucede si está haciendo los deberes y no le salen: tolerar la frustración no es sencillo así que tu hijo necesitará de tu empatía e interés para continuar intentando.
  3. Busca la interacción con tu hijo: ¿cuando lees un cuento tu hijo parece disperso? Intenta hacer la historia más atractiva cambiando de voz o haciendo gestos. ¿Otra idea? Haz preguntas a tu hijo sobre lo que está haciendo para mantener su interés y asegurarte de que está realmente prestando atención.
  4. Aprovecha los intereses de tu hijo: si a tu hijo le gusta hacer algo, las posibilidades de que mantenga su concentración aumentan. Por eso, es recomendable que busques actividades que le gusten para trabajar con él su atención.
  5. Varía las tareas cada cierto tiempo: la concentración disminuye con el correr del tiempo haciendo una misma tarea así que, pasado un tiempo, ¡varía lo que tu peque está haciendo!
  6. Crea rutinas: conocer qué viene después de cada situación, ayuda a tus hijos a enfocarse. Si tu hijo sabe que después de la merienda es el momento de hacer los deberes y una vez terminados llega el momento de jugar, ¡los hará más fácilmente que si está jugando y cortas esa actividad para que trabaje para el cole!
  7. Organiza las tareas: cuando el niño está más descansado, es el momento de darle las tareas que implican mayor concentración. ¡Organiza los tiempos!
  8. Pon objetivos: tener una meta es fundamental para los niños. ¿Terminar los deberes para ir al parque? ¿Ayudar a ordenar para después darse un baño?
  9. Intercala descansos: si la tarea requiere de gran concentración, dale pequeños descansos a tu hijo. Llevarle una taza de leche y unas galletas y conversar con él puede ayudarlo a relajarse para después continuar con la tarea.
  10. Realiza con tu hijo juegos que ayuden a mantener la concentración: las mejores opciones son puzzles, dibujos con números, juegos de memoria, buscar las diferencias, sopas de letra, mandalas y juegos de mesa, entre otros.

¿Qué te parecen estos consejos para ayudar a tu peque a mejorar la concentración?

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