Un batido de plátano es de esas cosas que nunca fallan. Tienes un par de plátanos maduros dando vueltas por la cocina, un poco de leche en la nevera y una pizca de canela… y ya está, te marcas una merienda de lujo en dos minutos. Lo bueno de esta receta es que no necesitas ni cacharros raros ni mil ingredientes. Nada. Solo lo básico.
A ver, la verdad es que todos hemos tenido alguna vez plátanos ya demasiado blandos como para comerlos tal cual, ¿no? Pues aquí viene el truco: en lugar de tirarlos, los usas para hacer un batido que, encima, está más rico cuanto más maduros estén. Así aprovechas la fruta, te haces algo rico y no gastas ni un euro extra. Todo ventajas.
Y oye, que no es solo cosa de niños. Un batido de plátano bien frío con su toque de canela te alegra la tarde igual tengas 7 que 70 años. Lo puedes tomar tal cual o acompañarlo con unas galletas, o incluso con un poco de avena si te va lo sano. Pero vamos, que la receta base ya está de diez.
ÍNDICE DE CONTENIDOS
Receta de batido de plátano
Ingredientes
- 2 plátanos maduros
- 300 ml de leche (puede ser entera, semidesnatada o vegetal, lo que tengas)
- 1/2 cucharadita de canela en polvo
Cómo hacer batido de plátano
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Lo primero, pela los plátanos y córtalos en trozos medianos. No hace falta que te líes mucho con el tamaño, es solo para que la batidora no se atragante y vaya más rápida. Si están bien maduros, mejor todavía, porque así no tendrás que añadir azúcar ni nada extra.
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Luego echa los trozos de plátano en el vaso de la batidora junto con la leche. Aquí puedes ajustar un poco la cantidad según te guste más espeso o más líquido, pero con 300 ml queda bastante equilibrado, ni muy aguado ni muy pastoso.
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Añade la canela en polvo por encima. Media cucharadita suele bastar para darle ese toque sin que se cargue el sabor, aunque si te va mucho la canela, pues pon un poco más. Eso ya va en gustos. Luego solo queda batir todo junto a velocidad media-alta durante un minuto, más o menos, hasta que quede una mezcla suave y sin grumos.
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Una vez listo, puedes servirlo tal cual, directamente, o meterlo en la nevera unos minutos si lo prefieres más fresquito. También puedes añadir un par de cubitos de hielo si no tienes tiempo para enfriarlo. Y listo, en menos de cinco minutos tienes un batido casero que está de cine.
Consejos para hacer un batido de plátano de lujo
- Si quieres que el batido esté bien frío desde el principio, puedes usar los plátanos congelados. Solo tienes que cortarlos en rodajas y meterlos al congelador unas horas antes. Así además queda más cremoso.
- Para hacerlo un poco más ligero, puedes usar leche vegetal, como la de avena o almendra. Queda igual de rico y es buena opción si no tomas leche de vaca.
- ¿Te gusta más dulce? Aunque con plátano maduro suele bastar, puedes añadir una cucharadita de miel o sirope, o incluso un par de dátiles si los tienes por casa.
- Si quieres que te llene más, puedes echarle una cucharada de avena fina antes de batirlo. No cambia mucho el sabor, pero hace que aguantes más sin hambre.
- Puedes incorporar también otras frutas que tengas y hacer un batido mixto. Te sugiero por ejemplo el batido de fresa y plátano que está de muerte.
- Añadir una pizca de vainilla o incluso una cucharada de yogur natural también le da un toque interesante, aunque no es necesario. Solo si te apetece variar un poco.
Cómo acompañar el batido de plátano
Este batido de plátano va bien casi a cualquier hora, pero donde más brilla es en el desayuno o como merienda rápida. Si tienes prisa por la mañana, te lo tomas tal cual y listo, ya llevas fruta, leche y algo de energía sin complicarte. Eso sí, si te mola hacerlo más completo, acompáñalo con un par de tostadas o unas galletas caseras, y vas servido.
A los niños les suele encantar, y como solo lleva tres cosas y todas naturales, pues mejor imposible. Puedes hacer una jarra grande y repartir en vasitos pequeños, como si fuera una merienda improvisada de última hora. Les pones una pajita y ya parece otra cosa.
Otra opción es tomarlo después de hacer ejercicio. No sé si a ti te pasa, pero a veces después de entrenar no apetece comer algo pesado, y aquí es donde este batido entra como anillo al dedo. Tiene potasio, es fácil de digerir y encima sabe bien. Puedes incluso meterle un poco de proteína si estás en ese plan, pero la base ya cumple bastante.
Pues ya ves, con tres cosas que seguro tienes por casa te haces un batido de plátano que está buenísimo, es rápido y encima te quita ese antojo de dulce sin pasarte. No hace falta complicarse ni tener mil ingredientes raros. Lo básico, bien hecho, muchas veces es lo que mejor funciona.
Bueno, espero que te animes a probarlo. Y si al final le das tu propio toque, pues mejor aún.
Si te gustan las meriendas saludables a base de fruta, no puedes dejar de probar la receta de chips de plátano al horno, que se hacen con rodajas finas de plátano maduro y un toque de aceite, y quedan crujientes sin necesidad de freír; la receta de helado casero de fruta, ideal para el verano, porque solo necesitas fruta congelada y un procesador para conseguir una textura cremosa sin añadir azúcar; y los sorbetes de fruta, que se preparan en minutos con fruta fresca y un chorrito de zumo de limón, perfectos para refrescarte sin complicarte la vida.
