Una ensalada de quinoa te salva el día. Así, sin más. Es de esas cosas que preparas en un momento y te hacen sentir que estás comiendo bien sin complicarte la vida. Y lo mejor es que puedes meterle lo que tengas por la nevera, que casi siempre queda rica.
A ver, no sé si te pasa, pero a veces abres el cajón de las verduras con cara de “¿qué hago yo con esto ahora?” Pues ahí es donde entra la quinoa, que combina con casi todo. Además, es saciante, no tiene gluten y es supernutritiva. Que oye, una ayudita nunca viene mal, ¿no?
Así que si te mola variar y no quieres repetir siempre la misma receta, aquí te dejo 10 ideas distintas de ensalada de quinoa para que elijas según el día, el humor o el antojo. Hay opciones más fresquitas, otras más contundentes, alguna con toque exótico… vamos, que aburrirte no te vas a aburrir.
ÍNDICE DE CONTENIDOS
- Ensalada de quinoa con pimientos y cebolla morada
- Ensalada de quinoa con tomate y pepino
- Ensalada con quinoa, berenjena, espinacas y queso feta
- Ensalada de quinoa con rábano, edamame y col morada
- Ensalada de quinoa mexicana
- Ensalada de pollo y quinoa con aguacate y naranja
- Ensalada de quinoa con salmón a la plancha
- Ensalada Waldorf de quinoa
- Ensalada de quinoa con nueces, apio y manzana
- Ensalada de quinoa negra con granada
- Tabbouleh de quinoa
- Cómo cocinar quinoa
Ensalada de quinoa con pimientos y cebolla morada
Esta es de las más coloridas y crujientes. Tiene ese punto fresco que apetece un montón cuando hace calor, y además se prepara en nada. Ideal si te va lo sencillo pero resultón.

Ingredientes: quinoa cocida; pimiento rojo en cubos; pimiento amarillo en cubos; cebolla morada cortada en cubos; guisantes cocidos; hojas de albahaca fresca; aceite de oliva virgen extra; zumo de limón; sal pimienta negra
Preparación:
Empieza mezclando la quinoa cocida con los pimientos y la cebolla morada. Añade los guisantes (mejor si están cocidos al dente, que no queden blandurrios). Luego pica un puñado de albahaca fresca y échalo por encima. Para el aliño, mezcla aceite de oliva, zumo de limón, sal y pimienta al gusto, y viértelo justo antes de servir. Si te gusta más potente, puedes añadirle unas gotas de vinagre balsámico o incluso un poco de mostaza.
Ensalada de quinoa con tomate y pepino
Esta es de las que te refrescan solo con mirarla. Lleva ingredientes muy básicos, pero bien combinados queda de lujo. Si tienes tomates de esos buenos, de los que saben a algo, aprovecha y úsala como excusa para lucirte.

Ingredientes: quinoa cocida; tomate rojo y tomate amarillo en cubos; pepino en cubos; hojas de lechuga troceadas a mano; aguacate en dados; hojas de cilantro fresco; aceite de oliva virgen extra; zumo de lima o limón; sal; un pelín de comino molido (si te gusta)
Preparación:
En un bol grande, mezcla la quinoa cocida con los tomates, el pepino y la lechuga. Añade el aguacate justo al final para que no se machaque. Echa un buen puñado de cilantro fresco picado (o menos, si no te vuelve loco), aliña con aceite, zumo de lima, sal y si quieres, un toque de comino. Remueve con cuidado y sirve fresquita. Si la dejas reposar media horita en la nevera, aún gana más sabor.
Ensalada con quinoa, berenjena, espinacas y queso feta
Si te va algo más templado y con sabor más profundo, esta combinación es brutal. La berenjena salteada le da ese toque meloso que contrasta genial con el punto ácido del queso feta. Y con espinacas frescas… ya te puedes imaginar.

Ingredientes:
quinoa cocida; berenjena en dados; espinacas frescas; queso feta desmenuzado; ajo picado; aceite de oliva virgen extra; sal; pimienta negra; un chorrito de limón (opcional)
Preparación:
Saltea la berenjena en una sartén con un poco de aceite y ajo hasta que esté doradita y tierna. No tengas prisa, dale su tiempo. Mientras, en un bol grande, mezcla la quinoa cocida con las espinacas crudas. Añade la berenjena templada, el queso feta desmigado y aliña todo con un buen chorro de aceite, sal, pimienta y si quieres, un poco de limón para levantar el sabor. También puedes comerla fría, pero recién hecha está tremenda.
Ensalada de quinoa con rábano, edamame y col morada

Aquí tienes una ensalada de quinoa crujiente, fresca y con un puntito diferente. El edamame le da proteína vegetal y un sabor suave, mientras que el rábano y la col aportan ese toque picantito y un color que alegra cualquier plato.
Ingredientes: quinoa cocida; rábanos en rodajas finas; edamame cocido y pelado; col morada en tiras finas; cebollino picado; semillas de sésamo; aceite de sésamo (opcional); aceite de oliva virgen extra; vinagre de arroz o de manzana; sal
Preparación:
Corta los rábanos en rodajas muy finas y la col morada en tiras. Mezcla todo en un bol con la quinoa cocida, el edamame y un poco de cebollino fresco. Para el aliño, puedes hacer una mezcla con aceite de oliva, un pelín de aceite de sésamo, vinagre y sal. Remueve bien y, si quieres darle un plus, espolvorea unas semillas de sésamo por encima. Es de esas que entran por los ojos y no decepcionan.
Ensalada de quinoa mexicana

Esta combinación es puro color y alegría. Tiene ese rollo tex-mex que engancha, pero en versión fresca y ligera. Si te gusta el picante, aquí puedes jugar a tu gusto. Y si no, simplemente lo suavizas y queda igual de buena.
Ingredientes: quinoa cocida; alubias rojas cocidas; maíz dulce; cebolleta en rodajas finas; tomate en cubos; ají o chile fresco picado; pepino en daditos; lima; cilantro fresco; aceite de oliva virgen extra; sal
Preparación:
En un bol grande, mezcla la quinoa cocida con las alubias, el maíz, el tomate, el pepino y la cebolleta. Añade el ají según lo valiente que estés ese día. El toque final es un aliño con zumo de lima, aceite de oliva, sal y un buen puñado de cilantro fresco picado. Déjala enfriar un ratito para que se mezclen bien los sabores… y listo. Va genial como plato único o para llevar.
Ensalada de pollo y quinoa con aguacate y naranja

Tiene un equilibrio muy guay entre lo salado del pollo, la cremosidad del aguacate y el toque cítrico de la naranja. No necesitas muchas florituras, solo ingredientes frescos y un aliño que acompañe sin tapar.
Ingredientes: quinoa cocida; pechuga de pollo a la plancha; aguacate en dados; gajos de naranja pelados; hojas de cilantro fresco; aceite de oliva virgen extra; zumo de naranja; sal; pimienta
Preparación:
Cocina la pechuga de pollo a la plancha con un poco de sal y pimienta, y córtala en tiras o dados. En un bol mezcla la quinoa cocida con el aguacate, los gajos de naranja (sin piel ni membranas) y el pollo. Pica un poco de cilantro fresco por encima y aliña con aceite y un chorrito de zumo de naranja natural. Si quieres, añade una pizca de comino o unas gotitas de vinagre suave. Fresca, saciante y con un punto diferente.
Ensalada de quinoa con salmón a la plancha

Una combinación que parece rara, pero funciona genial. El salmón le da cuerpo, el aguacate suaviza, y la naranja le mete un puntito fresco y dulzón que sorprende. Todo muy bien equilibrado, vaya.
Ingredientes: quinoa cocida; lomo de salmón a la plancha; aguacate en dados; gajos de naranja pelados; perejil fresco picado; aceite de oliva virgen extra; zumo de naranja o limón; sal; pimienta
Preparación:
Haz el salmón a la plancha con sal y pimienta, sin pasarte para que quede jugoso. Una vez templado, desmenúzalo en trozos grandes. Mezcla la quinoa cocida con el aguacate, los gajos de naranja y el salmón. Añade perejil fresco y aliña con aceite y un poco de zumo de naranja o de limón. Remueve con cuidado para que no se rompa el pescado. Queda de lujo tanto tibia como fría.
Ensalada Waldorf de quinoa

Ensalada de quinoa con nueces, apio y manzana
Es de esas ensaladas que parecen simples, pero te sorprenden con cada bocado. El crujiente del apio, lo dulce y ácido de la manzana y el punto tostado de las nueces hacen una mezcla muy redonda. Perfecta para cuando quieres algo ligero pero con textura.
Ingredientes: quinoa cocida; manzana (verde o roja) en cubos pequeños; apio en rodajas finas; nueces troceadas; zumo de limón; aceite de oliva virgen extra; sal; pimienta; opcional: pasas sultanas hidratadas
Preparación:
Corta la manzana en cubos y échale unas gotas de limón para que no se oxide. Mezcla la quinoa cocida con el apio y las nueces, y añade la manzana justo antes de servir. Aliña con aceite de oliva, sal y un toque de pimienta. Si te apetece, puedes añadir pasas sultanas hidratadas o incluso un poco de yogur natural al aliño.
Ensalada de quinoa negra con granada

Aquí todo juega a favor: el color de la quinoa negra, el brillo de los granos de granada, la naranja jugosa, los canónigos tiernos y los piñones tostados. Si la sirves en una comida con amigos, seguro que alguien te pide la receta.
Ingredientes: quinoa negra cocida; granada; naranja en gajos pelados; canónigos; piñones tostados; aceite de oliva virgen extra; zumo de naranja o de limón; sal
Preparación:
Saca los granos de la granada (puede ser lo más laborioso, pero merece la pena). Pela la naranja y separa los gajos sin piel. En un bol mezcla la quinoa negra cocida con los canónigos, la naranja y la granada. Añade los piñones tostados justo antes de servir para que estén crujientes. Aliña con aceite, un chorrito de zumo de naranja y sal.
Tabbouleh de quinoa

Esta es la versión con quinoa del típico tabbouleh libanés. Ligera, refrescante y perfecta como acompañamiento o como plato único. Va cargada de vegetales y hierbas frescas, así que es de las que no empachan nada.
Ingredientes: quinoa cocida; pepino en dados pequeños; tomate cherry. en trozos; pimiento amarillo picado en cubos; perejil fresco picado; hierbabuena fresca picada; zumo de limón; aceite de oliva virgen extra; sal
Preparación:
Lo ideal es que piques todo bien pequeño, casi como si fuera un pico de gallo. Mezcla la quinoa cocida con el pepino, el tomate, el pimiento y un buen manojo de perejil fresco picado. Si tienes hierbabuena, añade un poco, le da un aroma brutal. Aliña con zumo de limón, aceite y sal. Déjala reposar unos 15 minutos en la nevera para que los sabores se integren. Sienta de maravilla, sobre todo en verano.
Cómo cocinar quinoa

Vale, la quinoa hay que lavarla. Siempre. Es el paso que muchos se saltan y por eso luego dicen que tiene sabor amargo. Viene recubierta de una sustancia llamada saponina, que hay que quitar. Así que lo primero: enjuágala bien bajo el grifo, en un colador fino, durante un minuto o dos, removiendo con la mano o una cuchara.
Ahora, la cocción:
- La proporción básica es una parte de quinoa por dos de agua (1:2).
- Pon el agua en un cazo con una pizca de sal y, si quieres, un chorrito de aceite o una hoja de laurel.
- Cuando hierva, añade la quinoa, baja el fuego a suave, tapa y deja que se cocine unos 12-15 minutos, o hasta que se haya absorbido toda el agua.
- Cuando veas que los granitos se han abierto (tienen como un anillito blanco), ya está.
- Retira del fuego, deja reposar 5 minutitos tapada, y desgránala con un tenedor, como si fuera cuscús.
Y ya está lista para usar en ensaladas o lo que te apetezca. Puedes hacer más cantidad y guardarla en la nevera 2-3 días sin problema. Incluso congelarla.
Como ves, la ensalada de quinoa da muchísimo juego. Puedes tirar por lo fresco, lo contundente, lo vegetal o incluso meterle fruta. Es rápida, nutritiva y aguanta muy bien en la nevera, así que va perfecta para el día a día. Lo importante es ir variando ingredientes y no tenerle miedo a probar combinaciones nuevas. Bueno, y cocerla bien, claro. Así que ya tienes ideas para rato… ¡a darle caña a la quinoa!
Si te encantan las ensaladas y estás buscando ideas frescas y ricas para el verano, tienes que probar algunas de mis favoritas. Por ejemplo, la ensalada de pasta es genial porque la puedes hacer con lo que tengas por la nevera y siempre queda bien, además de ser súper completa. Otra que nunca falla es la ensalada de atún, un clásico lleno de sabor y proteínas que te apaña cualquier comida o cena de forma sencilla. Si te apetece algo con más fibra y que te deje bien lleno, la ensalada de garbanzos es una maravilla, con su textura y el toque de las verduras frescas. Y por último, la ensalada de arroz es súper versátil porque le puedes añadir casi cualquier cosa que se te antoje, desde verduras hasta pollo o marisco, ¡perfecta para llevarte al trabajo o a la playa!